XIOMARA CASTRO AFIRMA QUE SU GOBIERNO ES “EL MEJOR DE LA HISTORIA” PESE A LA CRISIS NACIONAL

La presidenta minimiza las expectativas ciudadanas y asegura que no es posible resolver los problemas del país en tres años, mientras Honduras sigue atrapada en violencia, corrupción y pobreza.

La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, sonríe y saluda con la mano levantada, usando gafas oscuras, en un evento oficial.

La presidenta Xiomara Castro afirmó que su gobierno es “el mejor de la historia” y que no puede resolver los problemas de Honduras en tres años.


La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, reaccionó este martes a las críticas de la oposición y a la creciente desconfianza de los ciudadanos, afirmando que “no es posible resolver todos los problemas del país en tres años y medio”, pero que, a su juicio, su administración ya puede considerarse “el mejor gobierno de la historia”.

Expectativas vs. realidad

El discurso de Castro refleja la tensión entre las altas expectativas generadas por su llegada al poder y la dura realidad que vive el país. Al asumir, prometió combatir la corrupción, desmontar las estructuras criminales heredadas del Partido Nacional y devolver la esperanza a los hondureños. Sin embargo, la violencia sigue en aumento, la impunidad permanece intacta y la pobreza se profundiza.

En los barrios y aldeas, la percepción es distinta a la narrativa oficial: los ciudadanos aseguran que el costo de vida se ha disparado, la criminalidad asfixia a las comunidades y la justicia brilla por su ausencia.

El espejismo del “mejor gobierno”

Afirmar que Honduras vive el “mejor gobierno de la historia” contrasta con hechos irrefutables. En poco más de dos años, la actual administración ha demostrado ser incapaz de romper con la corrupción y el clientelismo político. Peor aún, ha replicado prácticas de opacidad y nepotismo que tanto criticó en el pasado.

El caso del narco video que involucra a Carlos Zelaya –hermano del expresidente Manuel Zelaya y cuñado de la mandataria– sigue sin avances judiciales, reflejando un silencio cómplice del Ministerio Público y una evidente protección política.

Un país atrapado entre dos fracasos

El fracaso del Partido Nacional en sus 12 años de saqueo y complicidad con el narcotráfico preparó el terreno para que LIBRE llegara con la bandera del cambio. Pero hoy, la percepción ciudadana es que la situación más bien empeora: más corrupción, más deudas y menos esperanza.

El pueblo no pide milagros en tres años; pide coherencia, justicia y resultados. Y hasta ahora, la distancia entre lo prometido y lo ejecutado es abismal.

Análisis de EL PUEBLO

El verdadero problema no es si tres años son suficientes para resolver la crisis nacional, sino que el gobierno de Xiomara Castro parece carecer de la voluntad real para enfrentar a las estructuras de poder que ahogan al país.

El pueblo ya vivió el engaño de una “narco-dictadura” con el Partido Nacional. Hoy se enfrenta al desencanto de un gobierno que llegó con la bandera de la esperanza, pero que, en los hechos, ha repetido los mismos vicios de los que decía librarnos.

 

 

 

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